El Ballet en el S.XIX. 

La importancia de la mujer

El periodo llamado romántico transcurre desde 1815 a 1845

El ROMANTICISMO - Resumen | Características, Literatura, Pintura, Música...


Cortesía: Cuaderno de Historia. https://www.youtube.com/@CuadernodeHistoria


En el video de hoy repasamos qué fue la el Romanticismo. Veremos sus principales características y cómo impactó el Romanticismo en la Literatura, la Pintura, la Música y en la vida intelectual de los Siglos XVIII y XIX. 

El ballet romántico

Fuente: https://arteescenicas.wordpress.com

 

El Romanticismo aparece en Europa a finales del siglo XVIII. Se origina en Inglaterra y Alemania e irrumpe en cada uno de los restantes países europeos en distinto momento, según la evolución histórica propia. Supone un cambio de mentalidad, valores y visión del mundo. Sus características fundamentales, desde el punto de vista artístico, son el culto a la individualidad del artista, el arte utilizado como medio de expresión personal, y la preponderancia del sentimiento, de la pasión y la subjetividad, frente a la razón y la moral colectiva que representó el siglo XVIII.

Técnicamente, el ballet estaba preparado por los avances del siglo anterior, con la figura de Carlo Blasis, para evolucionar hacia una mayor independencia artística. La técnica de elevación (técnica de saltos y baile de puntas) encuentra en el Romanticismo su aplicación artística. Al mismo tiempo, un factor puramente técnico, la introducción en los teatros de la luz de gas, ayuda a introducir en los teatros una atmósfera completamente diferente, pues se ilumina el escenario y la sala permanece a oscuras. Los decorados, que aplican la técnica de Daguerre en superposición y efectos lumínicos, fueron otro elemento clave. El objetivo de todo ello era la representación del mundo romántico de los sueños, la fantasía, lo irreal, frente a lo terreno y concreto, pues se lograba crear un espacio escénico en el que se podía representar un espacio ideal que hacía perceptible ese mundo contrastado de realidad y ficción.

El nuevo ballet se desarrolla a partir de las óperas que triunfaban en París entre un nuevo público de la burguesía emergente. El ballet era una parte fundamental de esas óperas. Por eso se puede decir que la historia del ballet moderno comienza en 1831 con la representación de la ópera “Robert le Diable” de Meyerbeer. En esta ópera se apagaron por primera vez las luces de sala. El llamado “Ballet de las Monjas”, incluido en esta ópera, se desarrolla en un claustro gótico a la luz de la luna; las Monjas son espíritus levantados de su tumba con fantasmales trajes de tul blanco, es decir, el tutú romántico. No sólo estos trajes traen una revolución estética, sino que el tejido utilizado, gasa o tul, permitía movimientos más ligeros a las bailarinas. En este ballet debutó María Taglioni, fundadora definitiva del ballet romántico. Con esta bailarina, hija de un coreógrafo italiano y discípula de Vestris, se consigue por fin la aplicación artística y expresiva de la técnica de puntas.

María Taglioni interpretó después de este ballet operístico “La Sylphide”, que independiza el ballet de la ópera. “La Sylphide” fue un éxito total gracias a su libreto, que será un clásico en el repertorio romántico, y también debido a la consolidación de la bailarina como un ser etéreo e irreal, imagen que se perpetúa hasta nuestros días en el ballet clásico. Su argumento es paradigma de los gustos románticos.

La transcendencia de “La Sylphide” se agranda cuando se considera que un joven, Auguste Bournonville, asistió a su representación en 1834 y decidió crear su propia versión del ballet para realizarla en Copenhaguen, donde desarrollaba su carrera de bailarín y coreógrafo. Esta versión es la que ha llegado hasta nuestros días. El trabajo de Bournonville en Copenhaguen continúa actualmente en la enseñanza de su estilo en la Escuela de Ballet Real de Dinamarca. Un rasgo importante de esta escuela, que la identifica, es que los bailarines tienen gran importancia, equiparables a las bailarinas, en contraste con lo que ocurrió en París o San Petersburgo.

Bournonville, además, tuvo una visión del Romanticismo más colorista y popular, de tono nacionalista y basado en el folclore local. Su técnica particular se ha conservado gracias al aislamiento y puede resumirse en el trabajo en “batterie” (pequeños saltos), en el uso de un torso erguido mientras los pies realizan complicadas combinaciones de saltos, y la gran simplicidad y elegancia en el uso de los brazos.

El colorismo introducido por Bournonville en el ballet fue parte fundamental en el ballet romántico posterior, con la introducción del exotismo y el orientalismo.

Cuando se cerró en 1833, con la muerte de Fernando VII, el Teatro Real de Madrid, sus bailarines marcharon a continuar su carrera a París, llevando con ellos las danzas populares españolas con un gran éxito. La novedad que asombró al público y a los especialistas parisinos fue el uso expresivo de torso y brazos; esta técnica la adoptaría Fanny Elssler, bailarina austríaca, que representaría lo opuesto a la Taglioni, manteniendo así la dualidad que se estableció entre bailarinas anteriores.

Tras los éxitos dichos, la Ópera de París se encontró sin bailarina estrella, pero pocos años después surge una nueva bailarina, Carlota Grisi, que aúna el arte de Taglioni y Elssler. Su gran ballet fue “Giselle”, con libreto de Gautier. “Giselle” es un ballet que, al contrario de otros muchos de la época, ha sobrevivido al paso del tiempo, debido a que es una obra maestra en la concepción dramática y coreográfica.

“Giselle” aúna los aspectos coloristas y nacionalistas con lo irreal y lo fantástico. Su éxito se basó en varios factores; uno era que respondía totalmente a los parámetros estéticos de la época. Dividido en dos actos, seguía la tradición iniciada en “La Sylphide” de contraposición del mundo terrenal con el mundo fantástico, pero ahora era una sola bailarina la encargada de representar los dos mundos. Lo más importante, sin embargo, fue la creación de una música original, una partitura creada exclusivamente para el ballet, que fue compuesta por Adolphe Adam. Hasta ese momento, los ballets se habían coreografiado sobre fragmentos procedentes de óperas. La originalidad de la partitura hace que exista una unidad dramática y coreográfica, gracias a los leitmotivs de los personajes y las situaciones. En “Giselle” la danza es el tema, pero también el medio fundamental de contar la historia.

Hay que reseñar un acontecimiento importante para el desarrollo posterior del ballet. En 1845 se encontraron en Londres las cuatro grandes bailarinas del momento: Carlota Grisi, Lucile Grahn, Fanny Cerrito y María Taglioni. Benjamin Lumley, director del Teatro de Su Majestad, decidió que sería un suceso extraordinario reunirlas en una actuación. Se encargó a Cesare Pugni la composición de variaciones y entradas para cada una de las estrellas y una coda final en la que actuarían las cuatro juntas. La coreografía corría a cargo de Perrot, el coreógrafo de “Giselle”. Aparte anécdotas de competencia entre las cuatro estrellas, y que este ballet se concibió como un divertimento, este hecho pasaría a la historia del ballet por ser el primer ballet sin argumento; la coreografía no servía a otro fin que el de la propia danza. En el siglo XX, los ballets abstractos o sin argumento serán el motor principal de desarrollo de la danza clásica y contemporánea.

El “Grand Pas á Quatre”, como se llamó a este ballet, supuso una cima irrepetible del ballet romántico, pero también el destierro definitivo de las figuras masculinas en los escenarios. Los hombres seguían siendo maestros de danza y coreógrafos, pero el público rechazaba su presencia en el escenario.

 

 

Se produce también en este momento una crisis de personalidades escénicas, síntoma del agotamiento de las fórmulas románticas. Sin embargo, aún quedaba una gran obra, un último gran coreógrafo y una última gran estrella del ballet. Leo Delibes compone una magnífica partitura de ballet, “Coppélia”, que es convertida en una gran coreografía por Arthur Saint-Leon, e interpretada como primera bailarina por Giuseppina Bozzachi. Basada en un cuento de Hoffmann, autor romántico por excelencia, fue el último ballet romántico. Se estrenó en París en 1870, con coreografía de Saint-Leon. Uno de los logros de este coreógrafo fue haber desarrollado un método de notación coreográfico, que permite la conservación de sus obras. La historia de “Coppélia” y su música eran alegres y desenfadadas, y son un gran broche luminoso para cerrar toda una época. Sin embargo, la tragedia se avecinaba ya. Tras el estreno de “Coppélia”, la ciudad de París fue sitiada por las tropas prusianas. La joven bailarina Bozzachi muere de hambre y poco después muere también Saint-Leon. De este modo, un trágico suceso histórico cierra una gran época de brillantez artística para el ballet clásico.

Bailarinas, de Edgar Degas

CORTESÍA: Jesús Aguado Álvarez (https://www.youtube.com/@JesusAguadoAlvarez)

Breve vídeo sobre el ballet durante el período romántico. Incluye dos vídeos de la serie “Ballet Evolved”, del Royal Ballet de Londres, doblados al español. 

Filippo Taglioni

Cortesía: https://hmong.es

Filippo Taglioni (también conocido como Philippe Taglioni ; 5 de noviembre de 1777 - 11 de febrero de 1871) fue un bailarín y coreógrafo italiano y maestro personal de su propia hija, la bailarina romántica Marie Taglioni . (Tenía otro hijo que también bailaba ballet, Paul Taglioni). Además, aunque la versión de August Bournonville es más conocida, fue Taglioni quien fue el coreógrafo original de La Sylphide , en 1832. [1]

Biografía

Nacido en Milán de padre Carlo, recibió su formación en danza predominantemente con Carlo Blasis y Jean-François Coulon . Hizo su debut como bailarín a los 17 años en Pisa interpretando papeles femeninos . Bailó en otras ciudades italianas antes de convertirse en bailarín (a los 22 años) con la Ópera de París . Con Vestris firmemente en control allí, aceptó fácilmente una invitación para ser bailarín principal y maestro de ballet del Royal Swedish Ballet en Estocolmo , Suecia.

En Estocolmo, se casó con la bailarina Sophie Karsten , hija del famoso cantante de ópera sueco Christoffer Christian Karsten y la actriz polaca Sophie Stebnowska , en 1803. Juntos tuvieron dos hijos, Marie Taglioni y Paul Taglioni , quienes se convirtieron en bailarines.

Durante varios años la familia vivió en Viena y Alemania, pero para escapar de los peligros de las guerras napoleónicas, Filippo los trasladó a París. Bailó y coreografió en toda Europa, principalmente en Italia, Austria, Suecia, Dinamarca y Alemania. Finalmente, fue invitado a ocupar un puesto más permanente en el Theatre am Kärntnertor de Viena.

Una vez instalado en Viena, envió a buscar a Marie, que había estado estudiando ballet en París. A su llegada, Filippo se desanimó por su progreso artístico y comenzó a entrenarla él mismo. La hizo practicar ballet seis horas al día durante seis meses, utilizando un método nivelado de entrenamiento técnico. Él era muy estricto con ella y no sentía simpatía por sus dedos doloridos y sangrantes. Buscó hacer que su estilo fuera ligero y delicado, con énfasis en los saltos con balón y puntas , algo que no se había escuchado antes de esta época. Cuando estuvo lista, la llevó de regreso a París.

Después del debut profesional de Marie, se hizo tan popular que Filippo pudo negociar un contrato de seis años para los dos. El estreno triunfal de La Sylphide el 12 de marzo de 1832 la convirtió en la primera bailarina más aclamada del período romántico y a él en el coreógrafo más reconocido de la época. Se dice que esa noche inició el gran período romántico de la danza. Debido a este inmenso éxito, los dos viajaron mucho juntos y realizaron giras por Europa y Rusia.

A medida que crecía, se volvió excéntrico e impredecible, y finalmente perdió toda la fortuna cuidadosamente amasada de Marie en especulaciones imprudentes. Sin embargo, debe ser reconocido como un pionero en un estilo de ballet que alteraría para siempre la naturaleza misma del arte.

Taglioni murió en Como, Italia, el 5 de febrero de 1871, a la edad de 93 años.

 

Conceptos erróneos sobre La Sylphide

El público aficionado al ballet sabe que el ballet romántico La Sylphide está coreografiado por el maestro de ballet danés August Bournonville . De hecho, esa es la versión con la que el público de La Sylphide está más familiarizado hoy, pero no fue la versión que se dio en 1832.

La producción original de La Sylphide fue presentada por primera vez por el Ballet de la Ópera de París en la Salle Le Peletier en 1832, y fue coreografiada por el propio Filippo Taglioni con la música de Jean Madeleine Schneitzhoeffer , con libreto de Adolphe Nourrit a partir de una historia de Charles Nodier . Los papeles principales fueron bailados por Marie Taglioni y Joseph Mazilier .

Bournonville originalmente tenía la intención de presentar la versión de 1832 en Dinamarca, pero la Ópera de París exigía un precio demasiado alto por las partes orquestales de la partitura de Schneitzhoeffer. A la luz de esto, Bournonville decidió montar su propia versión de La Sylphide en el mismo escenario, con una nueva partitura de Herman Severin Løvenskiold . La producción se estrenó en 1836 con el prodigio Lucile Grahn y Bournonville en los papeles principales. Debido a la fuerte tradición del Royal Danish Ballet, esta versión todavía se realiza en Dinamarca hasta el día de hoy, y desde entonces se ha representado en todo el mundo.

En 1972, el maestro de ballet Pierre Lacotte revivió La Sylphide original de Filippo Talgioni para el Ballet de la Ópera de París, con la destacada bailarina Ghislaine Thesmar como Sylph. La partitura original de Schneitzhoeffer fue reconstruida a partir de un manuscrito conservado en la Bibliothèque nationale de France . Como la coreografía original de Taglioni se perdió hace mucho tiempo, Lacotte coreografió el ballet al estilo de la época . Desde entonces, el Ballet de la Ópera de París ha lanzado la producción en DVD / video dos veces.

 

Obras

1830: Le dieu et la bayadère

1832: La Sylphide

1833: La révolte au sérail

1836: La fille du Danube

1838: La gitana

1839: L'ombre

1840: Le Lac des fées

1841: Aglaë, ou L'Elève de l'amour

1852: Satanella oder Metamorphosen basada en El diablo enamorado (novela)

Cortesía: Ballet TIPS @BalletTIPS. https://www.youtube.com/@BalletTIPS/videos


Marie Taglioni


Marie Taglioni, Condesa de Voisins (23 de abril de 1804 - 22 de abril de 1884) fue una bailarina de ballet de origen sueco de la era del ballet romántico , parcialmente de ascendencia italiana, una figura central en la historia de la danza europea . Pasó la mayor parte de su vida en el Imperio Austriaco y Francia. Fue una de las bailarinas más célebres del ballet romántico, que se cultivó principalmente en el Her Majesty's Theatre de Londres y en el Théâtre de l'Académie Royale de Musique del Ballet de la Ópera de París . A ella se le atribuye (aunque no se ha confirmado que lo sea) ser la primera bailarina en bailar verdaderamente en punta .

Vida temprana

Taglioni nació en Estocolmo , Suecia, del coreógrafo italiano Filippo Taglioni y la bailarina de ballet sueca Sophie Karsten , nieta materna del cantante de ópera sueco Christoffer Christian Karsten y de la cantante de ópera y actriz polaca Sophie Stebnowska . Su hermano, Paul (1808-1884), también fue bailarín y coreógrafo influyente; actuaron juntos al principio de sus carreras. [1]

Matrimonio

Taglioni estaba casada con el conde Auguste Gilbert de Voisins en 1835, [2] pero se separó en 1836. Más tarde se enamoró de Eugene Desmares, un fiel admirador, que había defendido su honor en un duelo. Desmares y Taglioni dieron a luz a un hijo (ilegítimo) en 1836. Tres años después, Desmares murió en un accidente de caza. En 1842 dio a luz a su segundo hijo. Se desconoce quién es el padre, aunque el certificado de nacimiento indica que el padre es Gilbert de Voisins. Los nombres de los niños de Taglioni eran Georges Philippe Marie Gilbert de Voisins y Eugenie-Marie-Edwige Gilbert de Voisins. [3]

Entrenamiento

Taglioni se mudó a Viena con su familia a una edad muy temprana, donde comenzó su formación de ballet bajo la dirección de Jean-Francois Coulon.y su padre. Después de que Filippo fuera nombrado maestro de ballet en la ópera de la corte de Viena, se decidió que Marie debutaría en la capital de los Habsburgo. Aunque Marie se había entrenado con Coulon, su técnica no estaba a la altura de los estándares que impresionarían a las audiencias vienesas. Luego, su padre creó un riguroso régimen de entrenamiento de seis meses para su hija en el que ella ocuparía cargos por 100 cargos. El entrenamiento se llevó a cabo todos los días y consistió en dos horas por la mañana con ejercicios difíciles enfocados en sus piernas y dos horas por la tarde enfocados en movimientos de adagio que la ayudarían a refinar las posturas en el ballet. Taglioni tenía una espalda redondeada que la hacía inclinarse hacia adelante y tenía proporciones ligeramente distorsionadas. Trabajó duro para disfrazar sus limitaciones físicas aumentando el rango de movimiento y desarrollando su fuerza.Taglioni centró su energía en su forma y la forma para la audiencia y menos en trucos y piruetas de bravura. En Viena, Marie bailó su primer ballet coreografiado por su padre titulado "La Reception d'une Jeune Nymphe à la Cour de Terpsichore".[4]

Carrera

Litografía de Chalon y Lane de Marie Taglioni como Flora en Zéphire et Flore de Didelot . Londres, 1831 ( Museo Victoria y Alberto / Colección Sergeyev )

Antes de unirse a la Ópera de París, Taglioni bailó tanto en Múnich como en Stuttgart , ya los 23 años debutó en otro ballet coreografiado por su padre llamado "La Sicilien" que impulsó su carrera de ballet. Taglioni saltó a la fama como bailarina en la Ópera de París cuando su padre le creó el ballet La Sylphide (1832). Diseñado como un escaparate del talento de Taglioni, fue el primer ballet en el que el baile en punta tenía un fundamento estético y no era simplemente un truco acrobático, que a menudo implicaba movimientos y esfuerzos descorteses de los brazos, como había sido el enfoque de los bailarines a fines de la década de 1820. [5]

Pas de Quatre

Taglioni (centro) en Pas de Quatre , 1845

En 1837 Taglioni dejó el Ballet del Teatro de Su Majestad para aceptar un contrato de tres años en San Petersburgo con el Ballet Imperial (conocido hoy como Ballet Kirov / Mariinsky). Fue en Rusia después de su última actuación en el país (1842) y en el apogeo del "culto a la bailarina", que un par de sus zapatillas de punta se vendieron por doscientos rublos , supuestamente para cocinarlos, servidos con salsa. y comido por un grupo de balletomanes . [6]

En julio de 1845, bailó con Lucile Grahn , Carlotta Grisi , y Fanny Cerrito de Jules Perrot 's Pas de Quatre , un ballet que representa cualidades etéreas de Taglioni que se basa en Alfred Edward Chalon ‘impresiones litográficas s. [7] Pas de Quatre fue originalmente coreografiado para ser presentado a la reina Victoria, quien asistió a la tercera actuación. [7]

Jubilación, últimos años y muerte

Taglioni se retiró de la actuación en 1847; durante un tiempo se instaló en la Ca 'd'Oro en el Gran Canal de Venecia . Cuando el ballet de la Ópera de París se reorganizó sobre líneas más estrictas y profesionales, ella fue su espíritu rector. Con el director del nuevo Conservatorio de Danza , Lucien Petipa , y el antiguo alumno de Petipa, el coreógrafo Louis Mérante , formó parte del jurado selecto de seis miembros del primer concurso anual del cuerpo de ballet , celebrado el 13 de abril de 1860.

Su único trabajo coreográfico fue Le papillon (1860) para su alumna Emma Livry , a quien se recuerda por morir en 1863 cuando su traje fue incendiado por una lámpara de gas utilizada para la iluminación del escenario . Johann Strauss II compuso la "Marie Taglioni Polka" (Op. 173) en honor a la sobrina de Marie Taglioni, Marie "Paul" Taglioni, también conocida como "Marie the Younger". Las dos mujeres, que tienen el mismo nombre, a menudo se han combinado o confundido entre sí. [4] [5]

Más tarde, en Inglaterra, enseñó baile social y baile de salón a niños y damas de sociedad en Londres; también tomó un número limitado de alumnos de ballet. Residió en # 14 Connaught Square , Londres desde 1875 hasta 1876. [ cita requerida ]

Muerte

Taglioni murió en Marsella el 22 de abril de 1884, [5] el día antes de cumplir 80 años. [8] Su cuerpo fue trasladado a París. Existe cierto debate sobre si está enterrada en Montmartre o en Père Lachaise , o si la tumba de Montmartre pertenece a su madre. Los bailarines locales empezaron a dejar sus gastadas zapatillas de punta en la tumba de Montmartre como homenaje y agradecimiento a la primera bailarina de puntas. [9]

Ver también

    •    Mujeres en la danza

Referencias

    1    ^ Perfil , abitofhistory.net; consultado el 18 de febrero de 2016.

    2    ^ Wurzbach 1881 .

    3    ^ Murray, Christopher John (2013). Enciclopedia de la época romántica, 1760-1850 . Routledge. pag. 1122. ISBN 9781135455781.

    4     a b Chisholm, 1911 .

    5    ^ a b c Seccombe 1898 .

    6    ^ Kassing, Gayle (2007). Historia de la danza: un enfoque artístico interactivo . Cinética humana. pag. 131 . ISBN 9780736060356.

    7    ^ a b Moore, Lillian. (1965). Imágenes de la danza: tesoros históricos de la Colección Danza 1581-1861 . Biblioteca Pública de Nueva York. OCLC 466091730 . 

    8    ^ Marie Taglioni, la bailarina italiana , lifeinitaly.com; consultado el 18 de febrero de 2016.

    9    ^ Homenajes de zapatillas de ballet en Montmartre, 1 , 2 , 3



Fuentes

    •     Este artículo incorpora texto de una publicación que ahora es de dominio público :  Chisholm, Hugh, ed. (1911). " Taglioni, Maria ". Encyclopædia Britannica . 26 (11ª ed.). Prensa de la Universidad de Cambridge.

    •    Wurzbach, Constantin, von , ed. (1881). "Taglioni, Marie"  . Biographisches Lexikon des Kaiserthums Oesterreich [ Enciclopedia biográfica del Imperio austríaco ] (en alemán). 43 . págs. 17–23 - a través de Wikisource .

    •     Este artículo incorpora texto de una publicación que ahora es de dominio público :  Secccombe, Thomas (1898). " Taglioni, Marie ". En Lee, Sidney (ed.). Diccionario de Biografía Nacional . 55 . Londres: Smith, Elder & Co.

Lectura adicional

    •    Homans, Jennifer. Los ángeles de Apolo: una historia del ballet , Random House, 2010.

    •    Madison U. Sowell, Debra H. Sowell, Francesca Falcone, Patrizia Veroli, Icônes du ballet romantique. Marie Taglioni et sa famille , Gremese, 2016.

    •    Marie Taglioni, Souvenirs. Le manuscrit inédit de la grande danseuse romantique , édition établie, présentée et annotée par Bruno Ligore, Gremese, 2017.

Enlaces externos

    •    Medios relacionados con Marie Taglioni en Wikimedia Commons

    •    Marie Taglioni (1804-1884): A life on toe tip (presentación web de la colección Taglioni en el Instituto de Música de los Países Bajos )


Marie Taglioni

Condesa de Voisins

Taglioni en una litografía de 1839

Litografía de Chalon y Lane de Marie Taglioni como Flora en Zéphire et Flore de Didelot . Londres, 1831 ( Museo Victoria y Alberto / Colección Sergeyev )

Taglioni (centro) en Pas de Quatre , 1845

Video cortesía: Jacob Morales

@jacobmorales4666

@estudiodeballetclasico3016

Video cortesía: Estudio de Ballet Clásico

@estudiodeballetclasico3016

El misterio de la tumba de Marie Taglione

20 marzo, 2007



TAGLIONI no descansa en MONTMARTRE.

Coincidiendo con el bicentenario del nacimiento de la bailarina Marie Taglioni (1804 – 1884), un magazine de danza titulado “The Dance Insider” destapó una noticia que hizo furor en el mundo dancístico.

En 2004, un magazine de danza titulado “The Dance Insider” destapó una noticia que hizo furor en el mundo dancistico y en la ciudad luz.

Gracias a los estudios y averiguaciones de “The Dance Insider”, tras una minuciosa investigación, los funcionarios del Cementerio de Montmartre de París llegaron a la conclusión que la famosa bailarina sueca Marie Taglioni no estaría enterrada en ese lugar. El nombre que aparece en la tumba del cementerio de celebridades de París es Marie Taglioni pero el sepulcro no le pertenece a ella sino a su madre.

 

Marie Taglioni fue la máxima estrella del Romanticismo en el ballet. Aunque nació en Estocolmo, Suecia, el 23 de abril de 1804, provino de una familia de artistas milaneses célebres en toda Europa. Con el estreno de “La Sílfide”, obra de ballet creada por su padre y estrenada por ella en la Ópera de París el 12 de marzo de 1832, acompañada por Joseph Mazilier (1801 – 1868) y Lisa Noblet, se inició la era del baile en puntas y gracia a éste, la consolidación de un nuevo estilo de ballet: el romanticismo. Asimismo, la bailarina se consagró al bailar en puntas de pie por primera vez en la historia de la danza como «la más grande bailarina del momento».

Todo comenzó cuando el Instituto Italiano de Cultura reveló que Taglioni no se encontraba enterrada en la tumba que lleva su nombre pero sí se encontraría en el Cementerio de Père-Lachaise, en París, bajo el nombre de quien fuera su ex-marido Comte Gilbert de DES Voisins.

La alarmante noticia de estos acontecimientos, que corrió como la pólvora, empezó justo antes que dieran comienzo las celebraciones en homenaje a la bailarina. Durante los actos de homenaje el editor del magazine, Paul Ben-Itzak eligió como tema central para su ponencia la historia sobre el famoso sepulcro de Montmartre. Ben-Itzak recordó ver el nombre de Taglioni en el mapa del cementerio que visito en julio de 2001, pues deseaba conocer el sepulcro de Vaslav Nijinsky (1889 – 1950), el genio de la danza.

Durante su ponencia se proyectaron imágenes del sepulcro de Montmartre en el cual se podrían observar imágenes agrietadas de la lápida en donde decía “Marie Taglioni a su madre amada.” (Marie Taglioni – sa mere bien aimée).

En la primera fila de la audiencia se encontraba el prestigioso coreógrafo francés Pierre Lacotte (1932). A principios de los años 1970, Lacotte recreó el ballet “La Silfíde” por completo utilizando unas anotaciones que se emplearon para una película en la que Ghislaine Thesmar (1943) interpretaba el papel de “La Sílfide”. Esta pieza, en su versión reconstituida, forma parte del repertorio del ballet de la Ópera nacional de París.

Lacotte habría investigado arduamente para recuperar la versión perdida del ballet original de 1832 que incluía los famosos vuelos de las Sílfides tal como se estilaba en la época sujetas a gran altura por un complicado mecanismo de arneses y alambres. “Estoy apesadumbrado pero debo interrumpir,” dijo Lacotte que se encontraba trabajando en una biografía sobre Taglioni. “Es verdad, no es ese su verdadero sepulcro.” Mientras que un grito de asombro colectivo onduló a través de los espectadores Lacotte se lucio al explicar que la madre de la bailarina Sophia Taglioni se encontraba enterrada en un sitio elegido de Montmartre y que el cartel fue puesto allí por la bailarina como tributo a su madre.

Desde que “The Dance Insider” comentó lo de la existencia de la extraña tumba de Montmartre los lectores y amantes de la danza del mundo entero han enviado sus zapatillas de punta para que se colocarán en el sepulcro, el cual se ha convertido en una capilla en honor a la memoria de la que fuera la musa de “La Sylphide”.

Todo cambió de color cuando los funcionarios del departamento de preservación del cementerio de Montmartre buscaron en sus expedientes y confirmaron que de hecho esta tumba entierra a la madre de Taglioni y no a la bailarina. Al investigar su verdadero pan.

El mundo entero se sorprendió ante la revelación de Lacotte y de los funcionarios de Montmartre. Rápidamente se comunicaron con la oficina de la preservación de Pere Lachaise y confirmaron que de hecho Taglioni fue trasladada allí desde Marsella el 12 de enero de 1931, casi cincuenta años después de su muerte. La bailarina había decidió radicarse en Marsella, ciudad donde murió en 1884 a la edad de 80 años.

Si es impactante saber que Marie Taglioni no está en el sepulcro que lleva su nombre en Monmatre donde los bailarines de todo el mundo le rinden tributo viajando únicamente para ver la morada final de la bailarina, es igualmente impactante saber que el sepulcro, en el cual verdaderamente se encuentra enterrada, se identifica por el nombre del que fuera su ex-marido quién la rechazó por su pasión exclusiva hacia la danza.radero, encontraron un documento de 1990 del municipio de Marsella, en donde Taglioni fue enterrada en 1884. Cuando se les preguntó del porque en los mapas turísticos del cementerio continúan indicando que la bailarina es la que ocupa el sepulcro solamente explicaron que seria demasiado costoso substituir los mapas actuales por unos nuevos.

Lacotte divulgó que Taglioni fue enterrada realmente en Pere Lachaise -lugar de morada final de personalidades como Molière, Edith Piaf, Jacques-Louis David, Oscar Wilde, Modigliani, Marcel Proust, Chopin, Yves Montand, y Jim Morrison, entre otros – bajo el nombre del que fuera su ex-marido Comte Gilbert de DES Voisins.

En una visita a Pere Lachaise se puede corroborar que solamente aparece el nombre de una bailarina en el mapa del cementerio y es Isadora Dunca

La tumba de la bailarina se encuentra ubicada, según el mapa del cementerio, en rue Pacthod (región 94), encima de la colina de la mítica Edith Piaf (1915 – 1963) que cruza el camino del Columbarium du Cimetière. Tiene como vecinos a Isadora Duncan (1878 – 1927) y a una de las grandes figuras de la danza moderna: el coreógrafo americano Alwin Nikolai (1910 – 1993), quien fuera, a pedido del gobierno francés, creador del Centre Nationale de la Danse Contemporaine.

Marie Taglioni merece un sepulcro digno donde se la reconozca por quién fue y los bailarines del mundo merecen saber dónde ir a rendirle homenaje a la que fuera la más celebre bailarina de todos los tiempos.

Al finalizar su discurso, el editor Ben-Itzak Marie dedico unas palabras a este hecho sin precedencias: «Taglioni se cercioró que la memoria de su madre permaneciera honrada y ahora nos toca a nosotros revertir y rectificar los acontecimientos sobre el destino final de Taglioni de modo que los bailarines y amantes de este arte y las comunidades todas sepan exactamente quien fue esta gran artista para dejar en claro cual es la morada final de la que fue la madre de la danza». Fuente The Dance Insider

Cortesía:  © 2011 Danza Ballet

Tumba de la madre de Taglioni en donde se puede leer: «Marie Taglioni – sa mere bien aimee».
Cimetière de Montmartre © 2011 Danza Ballet. París.

CUANDO LAS BAILARINAS DE BALLET ARDÍAN COMO BRUJAS

Por Redacción QUO | 26 octubre 2016 | SER HUMANO |

Muchos conoceréis Le papillon, uno de los ballets más conocidos de la historia. Se trata de la única obra coreografiada de la célebre bailarina Maria Taglioni (1804-1884). Distribuido en varios actos, su argumento trata sobre el amor de Mariposa y Djalma, una historia romántica que se ve quebrantada por el hada Hazma.

Fue estrenada con gran éxito en la Ópera de París el 26 de noviembre de 1860. Su principal protagonista era Emma Livry, una bailarina con unas notables dotes artísticas que inspiraron a Taglioni.

Para hacer las representaciones en aquel entonces se precisaba de una iluminación bastante insegura: lámparas de fuego. Esto, unido a los tutús de las artistas, era una mezcla de lo más peligrosa. Tanto que, dos años después del estreno, Livry salió ardiendo en una prueba de vestuario, quemándose casi por completo. Por desgracia, tras ocho meses de agonía en la cama de un hospital, la bailarina falleció.

 

 

Al parecer, no fue la única. Se cree que decenas de bailarines fallecieron a consecuencia de la iluminación por gas, muy popular en los teatros del siglo XIX. Concretamente en Filadelfia, Londres y París las muertes por esta causa se contaban por decenas.

Livry tenía tan solo 16 años cuando hizo su debut en la Ópera de París en 1858. No tardó en convertirse en un prodigio, hasta que cuatro años después las llamas acabaron con su vida.

Pero no solo el fuego terminaba con las vidas de los bailarines en aquella época. Puestas en escena demasiado ambiciosas hacían que los artistas cayesen como moscas, ya fuesen aplastados, golpeados o quemados.

Tal fue la ‘carnicería’ que en 1859 un decreto imperial exigió que todos los sistemas y trajes de los bailarines fueran a pruebas de llamas. Para conseguir tal fin utilizaban un proceso llamado carteronizing, en el que los tutús se sumergían en un baño químico antes de ser utilizado en un escenario. Sin embargo, la técnica dejaba las delicadas faldas muy sucias, motivo por el que las bailarinas luchaban contra las medidas de seguridad. Livry fue una de las que se opuso, razón que acabó costándole la vida.

No creáis que solo en el s. XIX morían por su profesión. Actualmente, los cánones de belleza y la delgadez extrema a las que se someten continúan poniendo sus vidas en peligro.

Fuente: ozy.com

Cortesía: Espectro Lauren @espectrolauren

https://www.youtube.com/@espectrolauren

La Sylphide Royal Danish Ballet 22 jul 2019

LA SILFIDE

Cortesía: Varzedrie. Princesa Isadora. https://romanticamisterio.mforos.com 

Ballet en dos actos. Coreografía de Filippo Taglioni. Música de Jean Schneitzhoeffer. Libreto de Adolphe Nourrit. Decorados de Pierre Ciceri. Vestuario de Eugène Lami. París, Opéra, 12 de marzo de 1832. Intérpretes: Maria Taglioni (la Sílfide), Joseph Mazilier (James), Lise Noblet (Effie), Mme Elie (Magde), M. Elie (Gurn).

En primer lugar, os contaré algo sobre Marie Taglioni (Estocolmo, 23 de abril de 1804 - Marsella, 24 de abril de 1884).Era la reina del ballet en la época romántica, en el siglo XIX.

"La Sylphide"  la hizo famosa en toda Europa y cambió la historia del ballet. Ha sido habitualmente retratada representando este personaje. Se trataba de una mujer feúcha, excesivamente delgada, que sólo era apreciada por su exquisita técnica. Los críticos dijeron de ella que las flores no habrían sentido la impronta de sus pasos al bailar.


Se trata de la primera expresión danzada del Romanticismo, exponiendo su ideal con la figura protagonista tan magníficamente encarnada por la Taglioni, que haría de ella su mito personal. También establece el uso común de las puntas en la técnica de danza, al reforzar la imagen etérea de la sílfide, y por ende, de la mujer como mito romántico, frágil. Incluso en el cuerpo de baile encontramos infinidad de bailarinas con similares características, vestidas con blancos tutús y moviéndose sobre sus puntas sin apenas rozar el suelo (aparentemente), dando lugar a lo que se denomina ballet blanc. Dicho tutú en muselina blanca y hasta la rodilla, fue diseñado para este ballet y adoptado como paradigma del Romanticismo en posteriores obras. Sin embargo, esta obra maestra de Taglioni no es la que ha llegado hasta nuestros días, sino la versión de la misma adoptada por August Bournonville en el Teatro Real de Copenhague en 1836, con música de Hermann Lovenskjold y Schneitzhoeffer), "La Sylphide" es hoy un clásico de ballet.


 A mí por las fotos no me parece tan fea, pero creedme que es lo primero que te dicen cuando das historia de la danza... será que untaban a los dibujantes para que la sacaran primorosa, jejejeje... Todas estas ilustraciones son de la Taglioni bailando "La Sílfide". Se podía haber quedado en su casita, digo yo, porque las puntas duelen como una tortura china...

 

"La Sylphide"  la hizo famosa en toda Europa y cambió la historia del ballet. Ha sido habitualmente retratada representando este personaje. Se trataba de una mujer feúcha, excesivamente delgada, que sólo era apreciada por su exquisita técnica. Los críticos dijeron de ella que las flores no habrían sentido la impronta de sus pasos al bailar.

Se trata de la primera expresión danzada del Romanticismo, exponiendo su ideal con la figura protagonista tan magníficamente encarnada por la Taglioni, que haría de ella su mito personal. También establece el uso común de las puntas en la técnica de danza, al reforzar la imagen etérea de la sílfide, y por ende, de la mujer como mito romántico, frágil. Incluso en el cuerpo de baile encontramos infinidad de bailarinas con similares características, vestidas con blancos tutús y moviéndose sobre sus puntas,sin apenas rozar el suelo (aparentemente), dando lugar a lo que se denomina ballet blanc. Dicho tutú,en muselina blanca y hasta la rodilla, fue diseñado para este ballet y adoptado como paradigma del Romanticismo en posteriores obras. Sin embargo, esta obra maestra de Taglioni no es la que ha llegado hasta nuestros días, sino la versión de la misma adoptada por August Bournonville en el Teatro Real de Copenhague en 1836, con música de Hermann Lovenskjold y Schneitzhoeffer), "La Sylphide" es hoy un clásico de ballet.

Marie Taglioni (Estocolmo, 23 de abril de 1804 - Marsella, 24 de abril de 1884)

ARGUMENTO

 

La acción está ambientada en una aldea escocesa y en un bosque próximo. 

Primer acto: James espera, adormecido en una butaca junto a la chimenea, el alba del día en el que celebrará su boda con Effie. Aparece una sílfide junto a él que lo despierta con un beso. James trata de sujetar la visión que desde hace un tiempo tiene, pero la sílfide se va. Llega Effie, junto a su madre y los vecinos que ayudarán a los preparativos de la boda, como Gurn, eterno enamorado de Effie. James, que es un mortal, sabe que ella no es mortal y decide visitar a una bruja llamada Madge.  La bruja, enamorada del escocés le declara su amor, pero éste la rechaza. James despide de malos modos a la hechicera, a la que confortan la novia y Gurn. Entonces Magde predice que estos últimos se casarán entre sí. 

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James vuelve a quedarse solo y una vez más aparece la sílfide, que le invita a seguirla. Gurn los ve y corre a contárselo a Effie, pero James oculta a la criatura bajo la manta de la butaca, de modo que Effie no ve nada cuando llega. Gurn levanta la manta:no hay nadie debajo. Durante la fiesta de esponsales, la sílfide se hace presente sólo para James, que en vano la persigue. La sílfide le arrebata el anillo que debía ser para Effie, huyendo hacia el bosque perseguida por James, que abandona a su novia llorando. Gurn guía al resto de invitados en busca de James.

 

 

Segundo acto: Magde y su séquito preparan un hechizo en su antro. En el bosque, las sílfides revolotean, y James entra siguiendo a su amada, quien continuamente huye de él, aun mostrándose tierna. Los invitados a la boda desisten de la búsqueda. James decide irse también, pero entonces aparece la bruja para entregarle un chal con el que atrapar a la sílfide. 

 

En efecto, atrae a la criatura, que es atrapada en el chal. Súbitamente se le caen las alas y se desploma, muerta, en brazos de James. Varias sílfides bajan para recoger a su hermana muerta, mientras James cae derrotado a la par que se ven a lo lejos las bodas de Gurn y Effie. Magde se regocija por la venganza cumplida.

 

‍   Silfos y Sílfides | 7 Curiosidades de los espíritus del aire

 

En la actualidad, cuando oímos decir que una mujer es una sílfide, entendemos que es muy delgada, esbelta, grácil y hermosa. La palabra sílfide viene de «silfo», que Paracelso definió como espíritus elementales del aire. Acompáñanos a conocer a los Silfos y Sílfides y 10 curiosidades de los espíritus del aire que quizá no sabías.

 

Silfos y Sílfides


1. Paracelso fue un médico y alquimista alemán que vivió en el siglo XVI. Creía en los cuatro principios elementales: aire, tierra, agua y fuego, y que estos producían de manera espontánea unos espíritus elementales asociados a ellos. A los seres espirituales relacionados con el aire los llamó Silfos y Sílfides, a los del fuego, salamandras, los del agua fueron las ondinas y a la tierra le correspondieron los enanos o gnomos. Paracelso sacó sus ideas de fuentes anteriores a él, pero les dio un tratamiento completamente nuevo.


Silfos y Sílfides I 10 Curiosidades de los espíritus del aire

Eugène Faure – Sylphide (s.XIX)

2. La palabra Sílfide se cree que es un acrónimo de dos palabras latinas, «sylvestris» y «nympha» ya que en sus escritos Paracelso utiliza en ocasiones el nombre «sylph» para hablar de las ninfas del bosque. Otros autores creen que podría venir de la palabra griega antigua «σίλφη» (silphē) cuyo significado se aproxima a «polilla».


3. La descripción que hace Paracelso de las sílfides no se asemeja mucho a la idea que se tiene actualmente de estos seres influenciada por la literatura posterior. El alquimista creía que silfos y sílfides eran muy semejantes a los seres humanos pero «más recias, más gruesas, más altas y más fuertes». Creía que se parecían a los hombres porque se movían a través del aire como nosotros y si entraban en contacto con el fuego ardían, con el agua se ahogaban y con la tierra quedaban atorados.


4. Ni en la mitología griega ni en la romana encontramos seres parecidos a los silfos y sílfides. Los más semejantes son las ninfas, pero en los mitos de la antigüedad no existían ninfas aéreas, aunque las había del agua, de los bosques, de las montañas y de los árboles.


Silfos y Sílfides I 10 Curiosidades de los espíritus del aire

Sylphide -Marie Taglioni, la bailarina -1832


5. En la Edad Media, en algunos lugares de Europa, creían en la existencia de un tipo de ser mágico muy semejante a los silfos y sílfides. Eran espíritus gigantes que se desplazaban sobre las nubes batiendo su enormes alas rojas de fuego. Creían que el tono rojizo o anaranjado que tiñe el cielo en ocasiones, lo producía la visión lejana de estas extraordinarias criaturas sobre las nubes.



6. En otras zonas del viejo continente se pensaba que si un gran número de silfos y sílfides se reunían y batían acompasadamente sus alas, podían llegar a provocar remolinos e incluso huracanes.


7. La sílfide más famosa es Ariel. Este espíritu del aire es uno de los protagonistas de la obra de Shakespeare «La tempestad». Es salvada por Próspero y le sirve como esclava hasta que al final de la obra consigue la libertad.


Silfos y Sílfides I 10 Curiosidades de los espíritus del aire

«Próspero y Ariel», 1797 de William Hamilton

8. La imagen que tenemos hoy en día de lo que es una sílfide proviene tanto de la literatura como del famoso ballet romántico «La Sylphide». En él, una ninfa llega a la ventana de un joven escocés llamado James, prometido a una joven, y se enamora de él. Aunque las sílfides son invisibles, tienen la capacidad de mostrarse a quien deseen. La sílfide roba el anillo de boda y James la persigue por el bosque olvidándose de su prometida y enamorándose de ella. Entre la arboleda encuentra a una bruja, a la que el joven anteriormente había denunciado, y que quiere vengarse de él. La mujer le entrega un velo y le dice que si lo pone encima de la sílfide ésta perderá sus alas y se quedará con él para siempre. En realidad la tela estaba envenenada y la sílfide pierde sus alas y con ellas su inmortalidad y su vida. La historia finaliza con James profundamente afectado por lo sucedido, viendo a lo lejos como su antigua prometida se casa con su rival. El joven muere también y al final, el mal, representado por la bruja, triunfa.

Silfos y Sílfides I 10 Curiosidades de los espíritus del aire

Sylphide -Marie Taglioni, la bailarina -1832

Debido a que las bailarinas que representan a la sílfide suelen ser sumamente delgadas y esbeltas, esta imagen ha pasado a la cultura popular.


9. La literatura desde hace siglos nos presenta el término silfo o sílfide como sinónimo de hadas del aire. Seres diáfanos, espigados, altos y esbeltos, dotados de gran hermosura. Son espíritus benefactores para los humanos y suelen inspirar a los artistas. Su distracción favorita parece ser el esculpir las nubes dándoles formas que desde la tierra nos resulten familiares.


10. Según el folclore, aunque son invisibles, cuando lo desean los silfos y sílfides pueden mostrarse y tomar apariencia humana para amar y ser amados por hombres y mujeres de carne y hueso. Sin embargo, las parejas de estos seres espirituales deben abstenerse de blasfemar y deben ser sumamente educados, ya que de lo contrario estos seres del aire se sentirán contrariados y los abandonarán rápidamente.


¿Conocías a los silfos y las sílfides, los espíritus del aire de Paracelso? ¿Sabes algo más sobre ellos? ¡Compártelo con nosotros! Si quieres conocer a los espíritus del agua descritos por este alquimista, te invitamos a leer: Las Ondinas, los seres elementales relacionados con el agua


Cortesía: https://supercurioso.com


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